MEGAFON y su Teoria de la vibora y las dos peladuras

Aquel entrañable personaje que creara la maravillosa imaginación de Leopoldo Marechal, el Megafon: pibe de barrio porteño, crecido entre riñas y libros y autor de la mas maravillosa metáfora que de la patria he escuchado: “la de la Víbora y sus dos peladuras”. En aquella enseñanza, el Autodidacto de Flores buscaba entre otras cosas fundamentar los acontecimientos de la contrarrevolución del ‘55, a cargo de la Marina Argentina; y mediante la cual describía la convivencia de dos argentinas: una por fuera, un “cascaron fósil”, una peladura externa que intenta sobrevivir a la peladura sumergida, latente que intenta ser ahogada por la vieja y escamada piel exterior. En el suceder de esta Gran víbora, el pueblo, sumergido y aplastado intenta resquebrajar esa piel vieja, esa putrefacción de todo “un estilo” y salir así a la superficie victorioso. Sin embargo en ese proceso de liberación, las escamas del pasado, los fantasmas del horror intentan perpetuarse, apegarse a sus sillones burocráticos y evitar a toda costa el avance popular.
Increíble la tesis que construye Marechal desde su personaje a tal punto que encuentra su correlato en la actualidad. De hecho, es una constante en la historia Argentina desde la creación de las montoneras para evitar el asedio gorila de los Unitarios hacia la diversidad federal. Pero es muy interesante el matiz que otorga la coyuntura en la actualidad: si bien el aparato militar que otorgaba históricamente la salida por derecha de regimenes populares hoy es obsoleto, lo cierto es que funcionan aceitados otros mecanismos mas dinámicos e incluso mas poderosos.
En el correlato actual, Argentina sostiene aún una piel reseca, de resaca ya. Y constituye la unidad establecida por antiguas ideas Hegemónicas, que habían colonizado la planicie política. Época donde todo pasaba por otro rollo, y lo que no, simplemente los grandes medios difusores se encargaban rápidamente de que “no pasara” por la vida de los argentinos. Hoy, cuando la Hegemonía que se intenta establecer es otra, aristas impacientes y egoístas buscan volver, quieren regresar los modos, las formas, los tonos, los métodos y hasta algunas caras. Quieren resucitar fantasmas!
Ellos no entienden la Gran Metáfora del Oscuro de Flores, ellos no ven el suceder, simplemente no comprenden la pura naturaleza de Ser! Claro, pretenden ser inmortales; pero se olvidan que los únicos que lograron serlo (aunque metafóricamente) en la memoria del Pueblo Argentino fueron Perón y Evita.
Ahora, si el aparato militar que otorgaba a los sectores sociales mas conservadores la salida modesta de los Regimenes democráticos populares –o por lo menos con acento allí- ya se encuentra por lo menos en desuso o fuera de moda, cual es el andamiaje o la forma en la que se estructuran las presiones políticas a este tipo de Regimenes?
Acá vale intervenir una frase que le escuche a J. P. Feinmann: “Los medios masivos de comunicación son hoy los grandes defensores del Status Quo”; pero también le escuche otra mas interesante: “la ultima gran revolución, no le corresponde al proletariado internacional, sino al capitalismo: y es la revolución que en los últimos años lograron los medios de comunicación masivos”. Tomando como presupuesto esta ultima frase, no es difícil tampoco fundamentar la primera. Y hay toda una articulación orgánica a partir de las trincheras en disputa (digo trincheras en la mas inocente conceptualizacion gramciana).
En efecto se entienden a los Mass Media como esa Gran Muralla, la ultima quizas, con la que se termine de desempolvar aquella piel gris y seca; ellos son los “lanzeros” del estado de cosas dadas, son la ofensiva mas dinamica pero a su vez la mas reticente a los cambios revolucionarios.
Ayer la Marina, las FF AA, una iglesia mucho mas influyente y decidida, hoy los Medios Masivos de comunicación y todos sus espectros satelitales que alrededor suyo giran, defienden (ni tan organica, ni tan desestructurada) a la manera que pueden solo un estado de cosas dada, una estructuracion jerarquica y obediente de clase, la continuidad de determinada renta, modelo, etc, en fin buscan mantenerse en esa gigantesca rueda natural que es el suceder en la vida de los puebos; hoy es turno de que la nueva peladura, aquella que simbolizaba el Oscuro de Flores, demuestre su potencia, su capacidad de poder cambiar las cosas, revolucionar lo que hay, lo que es en busca de la paz.